Tercera Parte Código de Sodoma y Gomorra

Tercera Parte Código de Sodoma y Gomorra

  Una élite pequeña y rica elite que consiste en aproximadamente el uno por ciento de la población mundial controla la mayoría de los recursos económicos de la Tierra, y por lo tanto es capaz de propagar cualquier agenda para el control y la dominación de la población mundial,  como fue el caso de la dictadura de la vacuna contra el Covid.   Ante esta horrible  injusticia, el movimiento  de los Despiertos llama al activismo social y político con el objetivo de conformar  un número crítico de personas que sean capaces de recuperar el control para el pueblo.   Activistas de todo el mundo han obtenido su “Doctorado en los caminos de la Oscuridad” al revelar y publicar en las redes sociales todos y cada uno de los aspectos de los esquemas draconianos y maliciosos del Nuevo Orden Mundial. Los sentimientos de ira y miedo que la lectura de esta información por lo general provoca, se supone que deben ser aprovechados para luchar contra la Oscuridad.   Sin embargo, la Oscuridad es mucho más sofisticada y retorcida. Puesto que no posee ningún poder propio y, por lo tanto, debe alimentarse de la energía de los demás, se asegura de incitar constantemente pensamientos negativos y sentimientos de ira y miedo. Así, los Despiertos, que se unen y que manifiestan  contra la Oscuridad, sin saberlo, están, en realidad, haciéndole el juego, ¡Mientras que la Oscuridad logra aprovechar sus acciones para su propio beneficio! De hecho, los que se atreven a evaluar la situación objetivamente, tendrán que admitir  que las manifestaciones y concentraciones no han conseguido cambiar la realidad social y política.. Sólo han conseguido cansar y deprimir   ¿Con qué se compara esto? Esto es similar a una esposa maltratada cuyo marido psicópata absorbe toda su energía, ya que no tiene otra forma de existir más que como un vampiro energético .   Tras años de culparse a sí misma por su mal humor y sus intentos fallidos de tranquilizarlo, un día finalmente decide abandonarlo a él y a su hogar, anhelando y esperando ser libre. Sin embargo, ella no conseguirá su libertad mudándose físicamente de su hogar compartido, sino siendo capaz de desconectarse emocionalmente del pasado y realmente comenzar una nueva vida.   Por otro lado, si esta mujer sigue sintiéndose víctima o sigue reaccionando  a los intentos de su ex de provocarla para absorber su energía, para que pueda seguir   existiendo, acabará agotada y miserable aunque viva sola.   Por lo tanto, debemos comprender y recordar que aquellos que pueden asustarnos o perturbarnos, de hecho, ¡nos controlan a nosotros y a nuestra conciencia! Adicionalmente, debemos entender y recordar que cualquier cosa que resistamos sólo se intensificará. La siguiente historia ilustra maravillosamente este hecho: un hombre occidental acudió a un Maestro de meditación oriental pidiéndole que le enseñara a calmar sus pensamientos. El Maestro, mirando al hombre frente a él, tras darse cuenta de que la petición procedía del intelecto del hombre y no de su espíritu, quiso primero enseñarle que uno no puede controlar sus pensamientos a través del originador de los mismos, el intelecto. Por lo tanto, pidió al hombre que volviera al día siguiente y que, hasta entonces, evitara pensar en monos. ¡Qué petición tan extraña!”, pensó el hombre, que nunca pensaba en monos. No obstante, regresó  a su habitación, se acostó e intentó cumplir con las instrucciones  de evitar pensar en monos. Sin embargo, como ya saben, todo lo que resistamos, solo se intensificará. Por lo tanto, su mente estaba repleta de todo tipo de monos. A la mañana siguiente, completamente exhausto, volvió con el Maestro y le rogó una sola cosa: “¡Por favor, sácame los monos de la cabeza!”.                                                         *** A pesar de la idea de que uno debe luchar contra la Oscuridad, los profetas, los heraldos de la Luz, presentaron  una solución completamente diferente al problema del mal en el mundo: La Luz no desea luchar contra la Oscuridad, sino brillar. La Luz no culpa lo que ocurre en el exterior, pero exige trabajo sobre uno mismo. La Luz no se ocupa de los sentimientos de miedo e ira, sino que despierta el espíritu humano para que confíe y crea en la fuerza y la gracia de Dios. La Luz no llama al activismo político sino al activismo espiritual Si examinamos la historia del pueblo de Israel, podemos ver que los profetas siempre tuvieron una sola solución a la supresión y control por parte de imperios con agendas oscuras: ¡Alineación según la Voluntad de Dios! El profeta Jeremías advirtió durante años que el primer Templo sería estruido a menos que el pueblo de Israel purificara su podrida, decadente moral y espiritualidad. El profeta Ezequiel agregó otra razón para la destrucción del Templo: ¡ La adoración de ídolos dentro del propio Templo! A pesar de todo, el Reino de Judá, bajo el reinado de los reyes Joaquin y Sedequías, optó por ocuparse de continuos levantamientos y rebeliones contra el imperio babilónico. En consecuencia, en 586 AC Nabucodonosor, el rey de Babilonia, destruyó el Gran Templo. Por lo tanto, es absolutamente correcto decir que la destrucción del Primer Gran Templo no fue a causa del malvado Nabucodonosor, sino más bien a causa de la idolatria, las relaciones sexuales ilícitas e incestuosas y el derramamiento de sangre. El Segundo Gran Templo fue destruido en el año 70 DC  por razones similares: Debido a la falta de un verdadero liderazgo espiritual para el pueblo de Israel, que  estaba  plagado internamente por tumultuosas luchas políticas, un pequeño grupo de zelotes logró incitar a una guerra civil, arrastrando a toda la nación a la rebelión  contra el Imperio Romano.  Una rebelión cuyas consecuencias, desde  el principio, eran esperadas y conocidas. Aquí, también, la destrucción del Segundo Gran Templo no fue por el malvado Tito, sino por el innecesario odio interno y la guerra. Por lo tanto, toda la Biblia, desde la caída de Adán y Eva hasta la destrucción del Primer Templo, son, de hecho, una larga historia que describe la traición a Dios por parte de la humanidad! Esa es la verdadera razón del dolor y el sufrimiento y no el poder y la fuerza de los imperios que sirven a la Oscuridad! Sólo en contadas ocasiones la obstinada humanidad optó por alinearse con la Voluntad de Dios y confiar en Su fuerza y gracia, por lo que   se produjo una victoria inesperada: El Faraón fue derrotado no porque los israelitas se manifestaron en su contra sino porque la Luz respondió a los desesperados gritos de ayuda de los  esclavizados israelitas y  les envió ayuda a través del liderazgo de Moisés. El pequeño David derrotó al gran gigante filisteo, Goliat, porque tenía el arma más poderosa: su absoluta e inquebrantable fe y confianza en la fuerza y el poder de Dios! La pecaminosa ciudad de Nínive se salvó por la buena voluntad de su rey y su pueblo  de responder inmediatamente a la dura profecía del profeta Jonás: “Y el pueblo de Nínive creyó a Dios; y proclamaron ayuno, y se vistieron de cilicio, desde el mayor de ellos hasta el más pequeño… Que se cubran de cilicio, tanto  hombres como animales, y que clamen a Dios con fuerza, y que se conviertan cada uno de su mal camino y de  la violencia que está en sus manos”. Libro de Jonás:3                                                                                                                       **** Como mencioné, muchas personas creen que debido a un pequeño grupo de malvados, élites que controlan el mundo, la humanidad está en peligro de esclavitud y perdición. Sin embargo, casi nadie cree que un pequeño grupo de trabajadores de la Luz puede lograr lo contrario. Es decir, dar a la humanidad la oportunidad de redención y salvación Por encima de todo, la lógica del intelecto determina que sólo una masa crítica de los Despiertos puede traer alguna posibilidad de cambio a esta terrible realidad global. Sin embargo, la lógica de la Luz es todo lo contrario. Tan es así que será necesario repetir la lectura de lo siguiente para comprenderlo. Primero, según la Luz, la responsabilidad de la triste situación de la humanidad no recae en los malvados, sino en en los hombros de los Llamados y Elegidos de Luz  que fallaron en cumplir su misión, y al hacerlo, ¡entregaron su poder a la Oscuridad! Como antes mencionado, la Oscuridad no tiene poder propio, por lo tanto se alimenta de energía que absorbe de los demás. Su energía preferida es de las personas que fueron Llamadas o Elegidas por la Luz para cumplir una misión específica, y por esta razón, también se les dio poder adicional. La Oscuridad acecha alrededor de estas personas y  mediante  engaños e intrigas , es capaz de descarrilarlas y derribarlas y al hacerlo, toma poder para sí. En otras palabras, el principal problema de la humanidad no es que esté controlada por la Oscuridad, sino que aquellos que se suponía que debían dirigirla en nombre de la Luz, fracasaron en su misión y dejaron al mundo desprovisto de verdadero liderazgo espiritual. Segundo, según  la lógica de la Luz, no es la cantidad de personas las que pueden cambiar el destino de la humanidad e incluso salvarla, sino la calidad de las personas. Este principio se demuestra  en la historia bíblica de Sodoma y Gomorra que es también un código:  un pequeño número de Justos puede salvar a la humanidad de la destrucción y la ruina. Para quienes no conozcan o no recuerden la historia, he aquí un resumen: Sodoma y Gomorra eran dos ciudades situadas en la proximidad  del Mar Muerto, que fueron destruidas por Dios, debido al comportamiento  malvado y criminal característico de sus ciudadanos.  Cuando Abraham se enteró de su muerte inminente, no pudo  aceptarlo. Así que procedió a sostener una larga negociación con Dios, pidiéndole que los perdonara y evitara destruirlos argumentando que los justos no debían perecer con los malvados. Abraham le preguntó a Dios si destruiría Sodoma aunque vivieran  allí 50 justos. Dios respondió que no lo haría. En consecuencia, Abraham bajó el número a 45 y luego a 40 y así sucesivamente hasta que llegó a diez, y luego se detuvo. Como no se encontraron el mínimo de 10 justos ambas ciudades fueron destruidas cuando “El Señor hizo llover sobre Sodoma y Gomorra azufre y fuego , de parte del Señor desde los cielos”. (Génesis 19:24) Esa es la historia tal y como la aprendimos en la escuela, y refleja el bajo nivel de conciencia: ¿Recuerdas a Daniel, de dos años, que evitaba meter los dedos en el enchufe porque temía que su madre lo castigara? A un alto nivel de conciencia, el destino de Sodoma y Gomorra, que fue muy similar al de la Atlántida,  puede explicarse por las Leyes de la Creación.: Primero, una sociedad que se caracteriza por el hedonismo material, que lleva  a la promiscuidad sexual y, con ello, inevitablemente, a la corrupción moral que carcome los cimientos de la sociedad, trae  destrucción y ruina sobre sí misma, por su propia obra. Porque cosechamos lo que sembramos. Es, simplemente, la Ley  de Causa y Efecto. Segundo, lo que llamamos “catástrofes  naturales” no es más que el trabajo de la “autoridad de ejecución” de las Leyes de la Creación que están divididas en  los cuatro elementos, aire, fuego, agua y tierra.  En la Creación hay Seres Elementales que son responsables de cada uno de estos elementos y cuyas acciones pueden demostrarse en todos los relatos bíblicos. Por ejemplo,  en la historia de Sodoma y Gomorra, los Seres Elementales de fuego son los protagonistas, mientras que en la historia del Diluvio son los Seres Elementales de agua. Sin embargo, estos Seres Elementales no sólo destruyen lo que no corresponde a las Leyes de la Creación. También son responsables de ayudar y asistir a los seres humanos a alinearse con estas Leyes. El mejor ejemplo de ello son todos los acontecimientos naturales milagrosos  que tuvieron lugar durante la historia del Éxodo de Egipto. En otras palabras lo que la gente llama “maravillas de la naturaleza” es también una expresión de las acciones de los Seres Elementales  La cooperación entre los seres humanos y los Seres Elementales era una parte integral  del plan de la Creación. Sólo puede darse, mientras los seres humanos utilicen su libre albedrío para hacer el bien. El hombre tiene la capacidad de dar forma al mundo material a través de su voluntad que se materializa no sólo en acciones, sino también en palabras y pensamientos. ¿Quieren un ejemplo sencillo de esto, que ni siquiera requiere ningún estudio científico para su validación? Seguramente,  en algún momento, cada uno de ustedes ha experimentado cómo los pensamientos negativos  pueden debilitar su sistema inmunológico y hacer que el cuerpo físico se enferme. En la antigüedad, cuando la humanidad se esforzaba por alcanzar metas más nobles, ,la materia era menos densa y pesada.  Los Seres Elementales eran entonces capaces de levantar y mover rocas enormes y ayudar a construir hermosas y maravillosas obras maestras como Machu Picchu y las Pirámides de Egipto.                                                           *** Todavía tenemos que explicar y aclarar cómo la existencia de diez hombres justos en Sodoma y Gomorra podría haber evitado la destrucción de estas ciudades. ¿Cómo podemos entender este código, que dice que un número relativamente pequeño   de justos es necesario para que el mundo siga existiendo? Una persona justa es un ser humano cuya pureza interior lo convierte en un ancla para el Poder Divino que fluye a través de la Creación.  Eso es porque la Luz, de acuerdo con  la Ley de Atracción entre las Especies Homogéneas, buscará siempre anclarse en una persona  que en su esencia sea semejante a la Luz. Los justos no son líderes religiosos de barba larga ni maestros espirituales cuyos libros están en las listas de los más vendidos de Amazon.  La mayoría de ellos son desconocidos para  el público, e incluso si conocemos a un justo, probablemente no  lo reconoceremos  como un ancla terrenal o un canal del Poder del Creador. Sólo si somos algo más sensibles, la radiación que brilla desde el aura de esta persona   puede otorgarnos una experiencia única de despertar espiritual y dicha que tiene sus raíces en la proximidad a la Luz. Una experiencia que el intelecto es incapaz de captar. El poder de cada uno de estas personas  justas, o por su otro nombre, los Elegidos, puede ser igual  al de un millón de personas comunes. Por lo tanto, sus acciones, palabras y sobre todo sus pensamientos, tienen un efecto real sobre la densidad de la materia, y por consiguiente  colaboran  con los Seres Elementales y son capaces de prevenir catástrofes. Además, cada uno de ellos, basándose en su poder, está conectado con un gran número de almas que se sienten  atraídas a él debido a la Ley de la Atracción.  Si un justo toma la posición que la Luz le destina, de hecho, protege y guía a todas las almas que están conectadas a él, ya sea a través de la acción activa, por lo  que se encuentran con él, o a través de la acción pasiva, en la que su influencia está velada. El trabajo de la persona justa se puede comparar con la aorta, que transfiere sangre del corazón a las arterias, arteriolas, capilares, vénulas y venas. Cada una es importante  por sí misma, sin embargo si la aorta se revienta se interrumpe el suministro de sangre y la muerte es inminente. En cada generación, hay un Justo de la Generación, que dirige al resto de los justos, tanto activa como pasivamente. Todos los justos son, de hecho, el liderazgo espiritual del mundo, y por eso se dice que el destino del mundo reside en ellos.                                                                  ***. El Libro del Apocalipsis en el Nuevo Testamento describe a través de diferentes imágenes los acontecimientos de los Días del Juicio Final, que es el periodo exacto en el que nos encontramos como Humanidad. Según esta profecía bíblica, 144.000 espíritus humanos están destinados a trabajar todos juntos en todo el mundo en diferentes posiciones, de acuerdo con las instrucciones dadas por el Justo de la Generación. Es un número extremadamente pequeño en comparación con toda la población mundial.; sin embargo, es absolutamente necesario para ascender y salvar los espíritus humanos que aún pueden salvarse. Por lo tanto, el primer y más importante objetivo de nuestra escuela es encontrar a los miembros de este liderazgo espiritual de la humanidad. De ellos se dice “si fallas, el mundo caerá”. Si usted cree que un grupo muy pequeño de personas, que representa  sólo el uno por ciento de la población mundial, puede conducir a la humanidad hacia la Oscuridad, ¿por qué no cree que un grupo aún más pequeño puede llevar al mundo a la Luz? Si algo de lo que han leído u oído ahora les llega a lo más  profundo de su alma, quizás son los llamados para la misión!