Desastres Naturales:
¿Cambio climático o el Juicio Final?
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Introducción
Esta conferencia te lleva a nuevas alturas mientras entreteje los hilos desde el comienzo de la Creación hasta nuestros días, conectando los secretos de los tiempos antiguos con la nueva era.
¿Qué tienen en común la Gran Pirámide de Giza, Stonehenge, las Líneas de Nazca y los muchos círculos que han aparecido recientemente en las cosechas?
¿Cuál es la conexión entre los «dioses» de las diversas mitologías antiguas, la física cuántica, y especialmente con la energía libre de la que habló Nikola Tesla?
¿Cuál es la naturaleza de ese Gran Cometa del que hablan todas las profecías, refiriéndose al Juicio Final del Fin de los Días?
¿Y cómo se relaciona todo esto con los desastres naturales que están ocurriendo ahora por todo el mundo?
La conexión superior entre todos estos temas y mucho más será revelada y explicada a lo largo de los siguientes siete capítulos.
El conocimiento que estás a punto de encontrar es extenso y comprensivo, y muy probablemente el pensamiento intelectual rígido no será capaz de comprender completamente todo en tu primera lectura o escucha. ¡Pero si tu espíritu está alerta, percibirá la frecuencia y recibirá Poder, y eso es lo más importante!
Por esta razón, después de cada capítulo, recomendamos que tomes un breve descanso, cierres los ojos, relajes, y tal vez escuches música armoniosa.
Cada vez que leas o escuches esta conferencia nuevamente, lentamente obtendrás perspectivas adicionales.
Perspectivas que acercarán a los buscadores serios entre ustedes un paso más, a comprender la significancia de estos tiempos críticamente fatídicos.
Capítulo Uno: La Parábola de los Huéspedes Groseros
La Parábola de los Huéspedes Groseros
Había una vez un rey amoroso y generoso que ordenó a sus fieles sirvientes preparar esmeradamente jardines magníficos, maravillosos en su belleza y abundantes en su plenitud.
Todo esto era para que los jardines pudieran servir como lugar de residencia temporal para huéspedes que necesitaban quedarse en los jardines para su propio desarrollo, y quienes, a cambio, contribuirían con sus talentos únicos a la prosperidad de los jardines, mientras se adaptaban armoniosamente al orden natural que existía en estos.
Los sirvientes, que siempre se regocijan de trabajar al servicio del rey, llevaron a cabo su trabajo fielmente y esperaron ansiosamente la oportunidad de colaborar con los huéspedes que poseían sus propios talentos especiales.
Sin embargo, ¡qué grande fue su asombro cuando estos huéspedes llegaron y no solo olvidaron que eran huéspedes, sino que incluso comenzaron a comportarse groseramente y a exigir por demás!
¡Los nuevos huéspedes afirmaron que los jardines les pertenecían! Que los jardines estaban destinados a satisfacer solo sus deseos, y por lo tanto los huéspedes no tenían interés en nutrirlos para el beneficio de las generaciones futuras. ¡Comenzaron a alterar los jardines según sus ideas y así explotarlos!
Pero lo peor fue que estos huéspedes, en su afán de cambiar todo, se volvieron tan arrogantes y ciegos que afirmaron que los fieles sirvientes, ¡e incluso el rey mismo, no existían en absoluto!
Los sirvientes estaban muy tristes por todo esto. No entendían por qué los huéspedes se estaban comportando tan groseramente, ni que valor tenían realmente los talentos especiales que se suponía que poseían. Porque aparte del egoísmo y traer destrucción sobre todo lo que los sirvientes habían trabajado para construir y nutrir para ellos, los huéspedes, que mientras tanto se habían declarado a sí mismos como los propietarios, no mostraron virtud alguna en absoluto.
Así que los fieles servidores, quienes inicialmente habían revelado sus rostros brillantemente sonrientes, esperando formar amistades con los huéspedes, ¡comenzaron a esconderse y huir de ellos! Sin embargo, por orden del rey, quien no solo era amoroso y generoso, sino que también era paciente y lleno de gracia, los servidores sin embargo continuaron encubiertamente su trabajo. Esto era porque eran leales al rey, quien quería dar a los huéspedes repetidas oportunidades de arrepentirse y cambiar su mal comportamiento, y cumplir el propósito para el cual fueron enviados a los maravillosos y luminosos jardines.
Por lo tanto, para despertar a los groseros huéspedes, el rey comenzó a enviarles mensajeros, ¡pero los huéspedes los golpearon y los echaron!
¡El rey incluso les envió a sus dos amados hijos, pero los ingratos huéspedes los atormentaron y finalmente causaron sus muertes!
De vez en cuando, los fieles servidores también tenían que castigar a los huéspedes, para que quizás el sufrimiento los ayudara a regresar al camino correcto, pero todo esto fue en vano. No abandonaron su ignorancia ni su arrogancia, ni cesaron con la devastación y destrucción que causaban.
Pero el rey prometió a sus fieles ayudantes que llegaría un día cuando este largo período de gracia finalmente terminaría. Entonces vendría el tiempo del ajuste de cuentas final, cuando a los servidores se les permitiría ejecutar la Ley de Causa y Efecto: ¡destruir todas las obras feas de los groseros huéspedes y expulsarlos de los luminosos y maravillosos jardines!
Los huéspedes, que no entendían que no eran los dueños del lugar, entonces serían forzados a regresar a su hogar. Se irían lamentándose, avergonzados y con las manos vacías, habiendo desperdiciado el tiempo de gracia que se les dio para el desarrollo en los jardines luminosos a través de búsquedas equivocadas y pensando que sabían mejor.
En contraste, los pocos, que fueron huéspedes humildes y agradecidos y trabajaron en cooperación con los servidores para el honor del rey, regresarían a su hogar bendecidos y alegres más allá de toda medida, por toda la eternidad.
***
La moraleja de esta parábola será descrita a lo largo de toda la conferencia desde varias perspectivas, permitiendo una comprensión más profunda e internalización.
Pero primero, entendamos su aspecto más simple:
Por la Voluntad del Rey de Reyes, toda la Creación llegó a existir.
El origen de todos los seres humanos está en la esfera espiritual, que también se le llama Paraíso, de la cual todos emergimos como gérmenes espirituales, poseyendo un impulso innato para el desarrollo. Desarrollo significa la transformación de un estado inconsciente a un estado consciente, y para este propósito el germen espiritual requiere experimentar en el mundo de la materia densa, también conocido como «naturaleza.» (Esto es similar a cada semilla que puede florecer solo después de haber sido sembrada en la tierra y haber pasado por un proceso de desarrollo que incluye agua, luz solar y condiciones naturales desafiantes como vientos fuertes o sequía que aceleran el crecimiento y fortalecimiento.)
¡La naturaleza, perfecta en su diseño según las Leyes de la Creación, es el regalo más hermoso de Dios para permitir nuestro desarrollo!
Sin embargo, así como nadie espera que el pan, la ropa o las casas aparezcan de la nada y requieren colaboración y esfuerzo humano para hacerlo, la naturaleza misma no fue creada por Dios a través de una varita mágica, como podríamos haber aprendido en el jardín de infantes. Más bien, fue formada por seres que se desarrollaron de la radiación de Dios: los Seres Elementales.
Estos Seres Elementales dan vitalidad a la materia, y sin ellos permanecería sin vida. ¡Muerta! (La conexión entre esta vitalidad, la física cuántica y la energía libre, de la cual habló Nikola Tesla, será abordada en el quinto capítulo.)
En varias mitologías (abordaremos esto en el tercer capítulo también) los Seres Elementales fueron erróneamente llamados dioses, como Poseidón, dios del mar en la mitología griega, o Neptuno en la mitología romana. En el Libro de los Salmos, donde está escrito: «Atribuid al Señor, seres celestiales, atribuid al Señor gloria y fortaleza» (Salmo 29:1), estos seres, referidos como seres celestiales, fueron erróneamente identificados como ángeles. Esto es un error ya que los ángeles no descienden directamente de la Esfera Divina a la Tierra.
Los Seres Elementales son, de hecho, aquellos que han trabajado para crear los poderosos y maravillosos reinos de la naturaleza no solo los mares, montañas y vegetación, sino también todos los planetas, sistemas solares, galaxias y los siete universos durante miles de millones de años, y continúan cuidando con esmero su preservación y existencia hasta el día de hoy.
Estos seres esperaron miles de millones de años por la llegada de los primeros espíritus humanos al mundo de la materia densa aproximadamente hace tres millones de años y por su cooperación con aquellos espíritus humanos que estaban destinados a ser la corona de la Creación!
Esto es porque los seres humanos fueron dotados con un poder especial: ¡Poder espiritual! ¡Poder creativo! ¡El poder del libre albedrío que podría haber asistido a los Seres Elementales, que no poseen libre albedrío, de mil formas en la construcción y refinamiento de todos los reinos de la naturaleza!
De hecho, el espíritu humano, con esta habilidad innata, estaba destinado a ser un guardián bondadoso y transformar el planeta Tierra en un reflejo idéntico del Paraíso!
Sin embargo, desde que los seres humanos se rindieron ante Lucifer como ha sido explicado en detalle en la conferencia «El Plan de Lucifer» se desconectaron de su espíritu y se volvieron esclavos del intelecto, que los ató al tiempo y al espacio.
Así, en lugar de considerar sus vidas en la tierra meramente como una residencia temporal para el desarrollo del espíritu para que pudieran regresar a su verdadero hogar, que es el Paraíso, comenzaron a verse a sí mismos como los dueños del planeta Tierra!
Sin embargo, su motivación no era para protegerlo, sino más bien para explotarlo para sus propios deseos egoístas, lo que inevitablemente llevó a guerras interminables, destrucción y devastación.
En otras palabras: en lugar de mantener el anhelo por la Luz y por el desarrollo y ascensión del espíritu de regreso al Paraíso como un espíritu completamente consciente, el concepto de «anhelo» se distorsionó en innumerables deseos terrenales (posesiones materiales, automóviles, vacaciones, cenas lujosas,obsesión por la salud, mantenimiento rígido de cierto estilo de vida, etc.).
Podemos ser comparados con una persona que recibió las llaves de un reino inmenso pero en su lugar elige entretenerse con juguetes de niños.
Por lo tanto, mientras más nosotros ¡sí! ¡Somos esos huéspedes groseros! Mientras más nos alejamos de la influencia de la Luz más nos distanciamos también de la guía y protección de nuestros buenos amigos: ¡los Seres Elementales!
Hemos violado vergonzosamente la confianza que estos seres depositaron en nosotros, hasta el punto de que hoy ni siquiera sabemos sobre su misma existencia ni la magnitud de su actividad!
Pero no solo hemos traicionado y negado a estos siervos fieles, ¡sino también fundamentalmente a Dios!
En nuestra gran audacia, nos atrevemos a decir que el mundo se creó a sí mismo por sí mismo y nos pertenece completamente, y ya que esto es así, ¡podemos hacer con él lo que deseemos!
Sin embargo, ahora ha llegado el momento en que todos debemos internalizar y asimilar completamente: No estamos en esta Tierra por ningún derecho propio, sino por el Amor y la Gracia de Dios, que repetidamente nos brindan oportunidades para reconocer nuestros errores y apartarnos de nuestros malos caminos.
Los mensajeros, que son, de hecho, los profetas, fueron enviados a nosotros, a quienes expulsamos después de atormentarlos y negarnos a escuchar sus reprimendas, que nuestro ego rechazó. Desde la Divinidad misma, los dos Hijos de Dios también fueron enviados a nosotros: el Hijo de Dios y el Hijo del Hombre (sobre quienes puedes escuchar más detalles en la conferencia «Jesucristo: La Historia Real Según las Leyes de la Creación») ¡y fuimos nosotros quienes causamos sus muertes!
Sin embargo, el Amor Divino y la Justicia Divina no pueden separarse, ya que ambos están dirigidos únicamente hacia el mayor bien del hombre, que es el desarrollo del espíritu.
Por lo tanto, como nos hemos desviado seriamente del camino correcto, la Ley de Causa y Efecto trajo el Juicio hacia nosotros, es decir, sufrimiento, ¡para que despertáramos a través de él y enderezáramos voluntariamente nuestros caminos!
A veces como se explica en detalle en la conferencia «Profetas vs. Imperios» este Juicio fue traído de vuelta sobre nosotros a través de gobernantes crueles, quienes, de hecho, eran meramente instrumentos para implementar la Ley de Causa y Efecto, según el principio de que incluso los planes de la Oscuridad finalmente cumplirán el Plan de la Luz.
En otros tiempos, esto ocurrió a través de otros mensajeros que forma parte del mecanismo de Dios de las Leyes de la Creación: los Seres Elementales, quienes siempre fueron aquellos que implementaron el Juicio a través de las fuerzas de la naturaleza, sobre quienes se dice en el Libro de los Salmos (104:4): «Él hace de los vientos Sus mensajeros, Del fuego llameante Sus ministros.»
Por ejemplo, los Seres Elementales del fuego trajeron el Juicio sobre Sodoma y Gomorra, y aquellos responsables del agua hundieron la Atlántida.
Sin embargo, desde el mismo comienzo de la existencia del mundo material, estaba previsto que éste estaría destinado a la desintegración, ya que según las Leyes de la Creación, toda materia experimenta un proceso natural de comienzo, desarrollo y fin.
(Por ejemplo: ¿Cuántos años puede vivir una persona? Setenta, ochenta o noventa años, pero finalmente debe morir y su cuerpo se desintegrará. El mismo principio se aplica a nuestro planeta. Aunque aquí estamos hablando de un proceso que dura miles de millones de años, también llegará eventualmente a su fin. De hecho, tal como están las cosas, a nuestro planeta solo le quedan aproximadamente mil años.)
Este es el tiempo que los profetas llamaron los Días del Juicio Final, que vendrán antes del Fin de los Días. Este período es crítico para el espíritu humano, porque si no ha utilizado sus miles de encarnaciones para desarrollarse es decir, para transformarse de un estado de inconsciencia espiritual a consciencia espiritual no será capaz de cumplir su propósito y regresar a casa a su patria, al Paraíso, como un espíritu consciente.
Este es el destino más terrible para el espíritu, y es equivalente a ser borrado del Libro de la Vida: «el Libro» en el cual todo lo que cada espíritu humano ha experimentado a través de todas sus encarnaciones en la tierra está «inscrito».
Este período que todos percibimos ahora está caracterizado por la presión del Poder de la Luz, ¡que lleva al cierre acelerado de todos los ciclos kármicos para todos los habitantes de la Tierra!
Ahora serán los Seres Elementales, quienes solos pueden verdaderamente portar el título de «Guerreros de la Luz», quienes traerán el Juicio sobre la humanidad a través de las fuerzas de la naturaleza. Un Juicio que destruirá las creaciones erróneas de la humanidad arrogante, expulsará a todos los huéspedes groseros, y purificará la Tierra de todo lo que es hostil a la Luz.
Así, solo un porcentaje muy pequeño de la humanidad permanecerá, quienes estarán listos y dispuestos a aprender a convertirse en un nuevo ser humano: un ser humano con una consciencia espiritual, según la Voluntad de Dios.
¡El Reino de los Mil Años, cuyo tiempo ya ha comenzado, será así una escuela para la humanidad donde solo los pocos que comprendan todo esto sobrevivirán espiritualmente!
Capítulo Dos: Los Espiritualmente Ciegos y Sordos
Hoy, la gran mayoría de la humanidad puede dividirse en dos grupos:
Un grupo consiste en personas que se comportan como avestruces y continúan enterrando sus cabezas en la arena, a pesar del hecho de que todo lo que sucede a su alrededor está colapsando (pandemias, guerras, crisis económicas, aumento de la criminalidad, y por supuesto desastres naturales).
El otro grupo mira todo lo que está sucediendo y busca a alguien a quien culpar: en primer lugar, a las élites globalistas, para quienes todos los gobiernos del mundo trabajan con el fin de implementar un «nuevo orden mundial.»
Ambos grupos o se burlan de aquellos que hablan sobre el Juicio Final (porque no creen en Dios), o resienten a aquellos que, en su opinión, «se dedican a sembrar miedo» (y por lo tanto tienden a buscar falsos maestros que los «calmen» con promesas vanas).
Pero ambos grupos son espiritualmente ciegos y sordos. Además, tienen un denominador común:
La terquedad de su ego, que busca remover toda culpa y responsabilidad personal de sí mismo, y su deseo de continuar sus vidas terrenales placenteramente y sin ninguna perturbación, incluso si sus vidas van en contra de la Voluntad de la Luz.
Fue sobre tales personas que el profeta Jeremías dijo:
«¡Oíd ahora esto, pueblo necio y sin corazón, que tienen ojos y no ven, que tienen oídos y no oyen!» (Jeremías 5:21)
¡Oíd esto ahora! ¡Prestad atención a esto!
¡Nuestras opiniones y nuestras creencias simplemente no son relevantes ante el Poder y la Fuerza de Dios! ¡Ni ante el Juicio a través de las fuerzas de la naturaleza, que ahora nos golpea de vuelta, a nosotros, la humanidad pecadora, como un boomerang!
¡Y lo que será verdaderamente aterrador no serán las palabras de los profetas que nos advirtieron contra nuestra obstinación a seguir oponiéndonos a las Leyes de la Creación, sino el cumplimiento real de sus profecías!
Por lo tanto, cuando Jesús dijo: «¡Deja que los muertos entierren a sus propios muertos!» (Mateo 8:22), se refería a todos aquellos que se niegan firmemente a desarrollar vista y oído espirituales, porque quien es espiritualmente ciego y sordo es considerado espiritualmente muerto!
Por lo tanto, aquellos que son de mente estrecha y correspondientemente arrogantes, ya que la estrechez mental engendra arrogancia, no pueden ser ayudados.
Esta es la razón por la que esta conferencia está destinada solo para aquellos que están listos para abrir sus ojos y oídos, y así salvar su espíritu.
***
El Juicio Final, que tantas profecías han predicho, ya está aquí y ya no necesita ser profetizado o leído, sino que simplemente requiere abrir nuestros ojos para verlo rodar hacia nosotros:
Si miramos solo el año 2025, se caracteriza como un año de eventos naturales sin precedentes:
Erupciones volcánicas, inundaciones mortales, terremotos, tsunamis, tormentas severas, incendios masivos, enormes tormentas solares, un inmenso debilitamiento del campo magnético que rodea la Tierra y más.
¡Y no son los gobernantes de la Matrix en sus patéticos intentos de ingeniería climática quienes están creando el evento más grande en la historia de la humanidad!
Por lo tanto, aquel que ve en la ingeniería climática la raíz de todos nuestros problemas está sin saberlo, coronando a las élites globalistas como Señores del mundo!
¿Realmente crees que son más poderosos que Dios?
¿Piensas que porque tienen tanto dinero y poder terrenal, realmente pueden controlar la Creación de Dios?
¿Puedes ver lo ridículo que es esto?
***
Lo que es interesante es que, a diferencia de todos aquellos ignorantes que se burlan del Juicio Final, las élites saben exactamente lo que está a punto de ocurrir y por lo tanto se están preparando en consecuencia!
Mientras tanto, trabajan para distraer la atención pública de este mismo acontecimiento de innumerables maneras, ¡para prevenir la histeria pública masiva!
Un ejemplo perfecto de esto se presenta en la película cuyo título revela exactamente la estrategia que están usando:
«¡No Mires Hacia Arriba!»
***
En el Libro del Apocalipsis, que describe en imágenes los eventos de los Días del Juicio Final, estas preparaciones por parte de las élites se describen como parte de la representación de la apertura del sexto sello.
Pero antes de compartir la cita relacionada con los preparativos de las élites, permítenos primero explicar cuál es el significado de la apertura de los sellos:
En tiempos antiguos, un pergamino de papiro era escrito y enrollado, y sellos de cera eran colocados en las aberturas del pergamino. Cada uno llevaba el sello único del escritor, que garantizaba autenticidad y prevenía la falsificación.
El documento sería abierto en presencia de testigos, y solo una persona autorizada para hacerlo podía abrirlo.
El significado simbólico presentado en el Libro del Apocalipsis es que el propietario del pergamino, quien es Dios, declara la revocación del dominio humano sobre la Tierra, ya que la humanidad entregó su libre albedrío a Satanás desde el tiempo del pecado de Adán y Eva.
El sello es en realidad una cerradura que previene el acceso al conocimiento y poder contenido dentro de él.
¿Pero qué sucede cuando el sello es abierto?
Cada sello que es abierto libera o produce un evento o un poder, en otras palabras, causa una activación de algo que estaba «aprisionado» o «sellado» dentro de él.
El resultado es que con cada apertura de un sello, un nuevo Juicio Divino es liberado sobre la Tierra, como parte del proceso de devolver la Tierra al Poder de Dios.
Sin embargo, aquel que está autorizado y es capaz de abrir los sellos del pergamino y causar esta activación no es Jesús el Hijo de Dios quien supuestamente debe regresar en la Segunda Venida, como la tradición cristiana erróneamente afirma, sino una figura completamente diferente: ¡el Hijo del Hombre!
Todo esto tiene lugar ante los testigos: los 144,000 Llamados.
(Elaboramos sobre el Hijo del Hombre, los Llamados y las activaciones simbólicas que tienen lugar hoy en día en nuestro curso avanzado.)
***
Ahora, regresemos a las élites y la cita del Libro del Apocalipsis sobre ellas:
«Y los reyes de la tierra, y los grandes, y los ricos, y los capitanes, y los poderosos…se escondieron en las cuevas y entre las peñas de los montes; Y decían a los montes y a las peñas: Caed sobre nosotros, y escondednos del rostro de aquel que está sentado sobre el trono…» (Capítulo 6:15 16)
Y en efecto, hay muchos informes detallados de que personas adineradas e influyentes están realmente construyendo búnkeres y refugios subterráneos lujosos (¡incluyendo piscinas, cines, gimnasios, e incluso pistas para autos!)
Por ejemplo, ¡Mark Zuckerberg construyó un complejo subterráneo en Hawái, costando 270 millones de dólares!
¡Se reporta que Bill Gates, Jeff Bezos, y Elon Musk tienen búnkeres privados en varias ubicaciones alrededor del mundo!
Nueva Zelanda es considerada un «destino de escape deseado por las élites estadounidenses,» además de lugares aislados en los Estados Unidos, como Dakota del Sur y Montana.
Si investigas a fondo, descubrirás que muchos países desarrollados, como Finlandia, Japón, Canadá, y Noruega, ya están liderando construcciones subterráneas y conduciendo excavaciones bajo la superficie, aunque muchos de sus residentes no están conscientes de esto…
Sin embargo, ¡ningún espíritu humano será capaz de escapar de su karma! ¡Ni siquiera escondiéndose bajo tierra!
También, debido a la mentalidad extremadamente materialista de estas élites, olvidan que en última instancia, sus cuerpos también tendrán que desintegrarse según las Leyes de la Creación,a pesar de tener suficiente dinero para construirse un búnker lujoso. Entonces, cuando el alma es liberada del cuerpo físico, serán forzados a descubrir inevitablemente lo pobres que son en el Reino de Dios.
¿Cuánto durará el Juicio y su gran purificación que la acompaña? Esto, nadie puede decirlo. Podría suceder en unos pocos meses o a lo largo de toda una generación, pero en última instancia ¡esto es lo que ha sido escrito y esto es lo que será!
***
Por lo tanto, ya en esta etapa de la conferencia y antes de profundizar más, tienes las respuestas a preguntas que seguramente están surgiendo dentro de ti:
- 1. ¿Cuál es la razón principal para la proliferación de desastres naturales en todo el mundo?
El Juicio que se manifiesta a través de las fuerzas de la naturaleza de los Días del Juicio Final, produciendo el cierre de todos los ciclos kármicos.
- 2. ¿Por qué los medios de comunicación principales apenas reportan sobre ellos?
Porque si las personas entendieran todo lo que está a punto de desarrollarse, estallaría una histeria masiva incontrolable.
- 3. ¿Estos desastres son causados por el hombre: ingeniería climática o calentamiento global?
Como se mencionó, la causa principal de la intensificación de los eventos naturales mayores es el Juicio de los Días del Juicio Final.
Sin embargo, la humanidad ciertamente ha aportado su «contribución» al asegurar que estos eventos no solo traerán la renovación de la naturaleza como se pretendía en el Plan original de la Creación sino que se convertirán en catástrofes.
Rompimos nuestro pacto con la naturaleza y los Seres Elementales mucho antes de que las élites inventaran arrogantemente tecnologías para controlar la naturaleza a través de la ingeniería climática.
Por lo tanto ahora, los Seres Elementales no solo destruirán nuestras obras feas que ignoraron las Leyes de la Naturaleza sino que también nos devolverán las consecuencias destructivas de todo lo oscuro e impuro que hemos tejido en nuestros pensamientos, nuestras emociones y en nuestras palabras.
Por lo tanto, en el Juicio Final, todas las obras erróneas de la humanidad serán destruidas.
Al mismo tiempo, la naturaleza se renovará, como se puede ver por ejemplo, en la formación de nuevas islas en Tonga, en el Océano Pacífico.
Un incendio forestal devastador proporciona un ejemplo convincente de este principio. La naturaleza misma se recupera rápidamente de las llamas con suelos fértiles y nuevos bosques emergiendo de las cenizas. Pero cuando el infierno se extiende a los asentamientos humanos, borra de forma permanente los medios de subsistencia y la infraestructura. Las viejas obras humanas son borradas, convirtiéndose en cosa del pasado, mientras la naturaleza se renueva a sí misma.
- ¿Qué es el Juicio a través de las fuerzas de la naturaleza del que hablan todas las profecías, y quién es realmente responsable de llevarlo a cabo?
Como se mencionó, este es el tiempo del cierre de todos los ciclos kármicos, cuando el planeta Tierra entra en su fase de desintegración, y el responsable de esto no es simplemente la naturaleza cumpliendo su papel, sino aquellos que la crearon y la mantienen: los Seres Elementales.
- ¿Podría lo que nos parece como desastres ser en realidad algo completamente diferente?
«Desastres naturales» es el nombre que el intelecto dio a todos estos acontecimientos, ya que son desastrosos para todo lo que ha construido. Mientras que en realidad, desde la perspectiva espiritual, esto no es un desastre, sino ¡un proceso de purificación necesario!
Esta purificación es como un cuerpo liberándose de toxinas a través de fiebre, vómito y sudoración para superar invasores dañinos y regresar a la buena salud. Además, en nuestro estado actual, nuestro espíritu no tiene oportunidad de hacer oír su voz y liberarse de sus «dos carceleros» la conciencia intelectual y la conciencia emocional sin sufrimiento terrenal, físico extremo.
Nosotros los humanos hemos, durante miles de años, tirado de la cuerda de la Gracia Divina, la cual es nuestra única oportunidad de cambiar voluntaria y gozosamente, sin sufrimiento. Ahora, en el Juicio Final, esa cuerda está a punto de partirse, obligandonos a cambiar a través del sufrimiento.
Esto es porque solo el sufrimiento extremo hará que las conciencias erróneas sean incapaces de explicar la realidad, y entonces finalmente, la conciencia espiritual puede comenzar a desarrollarse en aquellas personas cuya chispa espiritual aún no ha sido completamente extinguida.
Por lo tanto, si miramos los eventos naturales desde la perspectiva del espíritu, que solo busca ascender y regresar a la Luz, incluso el sufrimiento se convierte en una forma necesaria de gracia.
Un ejemplo perfecto de esto se puede ver hoy:
Cuando las personas se encuentran en el corazón de lo que llaman un «desastre natural», muy a menudo lo que sale de sus bocas son estas tres palabras:
“¡Oh, Dios mío!”
Es triste que recordemos la existencia del Creador solo en situaciones tan extremas, pero estas tres palabras testifican exactamente lo que dijimos antes:
Solo cuando el intelecto y las emociones ya no tienen palabras para argumentar y hacer sus afirmaciones ridículas, solo entonces el espíritu finalmente hará lo que siempre estuvo destinado a hacer: ¡mirar hacia arriba!
- ¿Qué podemos hacer ahora para ser librados de lo peor? ¿Podemos hacer algo todavía?
Sí, reconocer nuestra culpa, examinarnos implacablemente, transformar y reconstruir toda nuestra existencia sobre una base espiritual en lugar de sobre una intelectual y emocional.
En otras palabras: en lugar de convertirnos en expertos y «obtener un doctorado» en toda la Oscuridad y el mal que nos rodea y desviar toda responsabilidad espiritual de nosotros mismos, ¡debemos obtener un «doctorado en nuestro propio ego»!
Incluso si es a ultima hora, ¡debemos caer de rodillas, inclinar nuestras cabezas y comenzar a corregir y purificar todo lo que se ha desarrollado incorrectamente dentro de nosotros!
Solo si nos enfocamos en esto con honestidad, humildad y con toda nuestra fuerza, intención y dedicación, podemos reparar nuestro karma y también merecer protección y custodia de los Seres Elementales (como sucedió, por ejemplo, durante todo el Éxodo de Egipto, donde los Seres Elementales «protagonizaron» bajo la guía de Moisés, como se explica en detalles en nuestra serie de conferencias, Historias Bíblicas como Códigos para Descifrar la Realidad del Mundo Actual).
Sin embargo, ¡aquellos que ya hoy verdaderamente han emprendido el camino requerido de corrección y purificación ya no tienen miedo!
Con una confianza absoluta en Dios, viven en un estado de plena gratitud hacia el Creador y a todos Sus fieles servidores, quienes a través del Juicio Final, ¡que también es una expresión de amor!, finalmente les dan la oportunidad de regresar y convertirse en un ser humano en el sentido más pleno de la palabra.
Capítulo Tres: Sobre la Actividad de los Grandes Seres Elementales (Los Señores de la Naturaleza)
Comenzamos este capítulo con una explicación de cómo las diversas mitologías llegaron a la conclusión errónea de que los grandes Seres Elementales son dioses que gobiernan sobre los elementos básicos: Fuego, Agua, Aire y Tierra.
Los médiums de las naciones primitivas solo podían ver su entorno astral, ni siquiera el etéreo, y ciertamente no las Esferas Animísticas y Espirituales.
Por lo tanto, solo podían ver demonios: seres creados únicamente del miedo, ansiedad, celos, resentimiento, envidia, codicia o lujuria de los seres humanos y que también son alimentados por esas mismas emociones.
Por esta razón, encontramos entre los pueblos primitivos miedo y adoración de demonios, ¡porque eso es lo que veían y eso es lo que los asustaba!
Estos demonios no tienen vida propia y dependen completamente de las emociones de miedo y ansiedad de quienes los crearon, así como de la energía de otros seres humanos asustados.
Aquí también opera la Ley de Atracción entre Especies Similares, y por lo tanto, cualquiera que esté gobernado por el miedo atrae magnéticamente a estos demonios de miedo y ansiedad hacia sí mismo, ¡lo que solo aumenta su miedo y ansiedad hasta el punto de la desesperación y la locura!
En contraste, la ausencia de miedo repele naturalmente a estos seres, y por lo tanto se sabe que una persona valiente siempre tendrá ventaja sobre una que constantemente tiene miedo.
Por lo tanto, no es sorprendente que entre estos pueblos primitivos, que tenían una conciencia espiritual subdesarrollada, surgieran varios tipos de hechiceros que descubrieron cómo los demonios podían ser repelidos a través de la paz interior, saltos, bailes o canciones de exorcismo que inspiran valor.
Este tema es fascinante por dos razones: primero, porque muchas personas sufren de depresión y ansiedad en nuestro tiempo, y segundo, porque hoy están surgiendo todo tipo de chamanes cuyas técnicas, como las ceremonias de ayahuasca, solo abren las puertas al mundo de los demonios para personas espiritualmente inconscientes que se convierten en víctimas de estas prácticas.
Sin embargo, este tema va más allá del propósito de la conferencia de hoy, así que continuemos con los altos niveles de la capacidad clarividente. ¡Aquellos con habilidades clarividentes entre los griegos, romanos y pueblos germánicos pudieron ver aún más lejos! Su visión alcanzó más allá del mundo material hasta la esfera animista que existe por encima de él, que se encuentra debajo de la esfera espiritual que es el Paraíso.
Durante el desarrollo de estas naciones, también fueron capaces de percibir a los gobernantes de los elementos y sentir una conexión profunda con ellos, porque estas criaturas están cerca de esa misma parte animista que los humanos también portan, además del espíritu.
La capacidad de ver, sentir y escuchar a los Seres Elementales fue el logro más alto de esos pueblos en aquel tiempo, y por lo tanto era natural que vieran a estos gobernantes de los elementos (que eran tan sublimes y diferentes) como los más elevados de todos y los llamaran:
«Dioses» y su morada inaccesible: Olimpo o Valhalla.
La pareja gobernante suprema reside en la cima de la Esfera Animista. A pesar de recibir nombres diferentes en distintas tradiciones, todos simbolizan el mismo significado.
Los pueblos germánicos y nórdicos llamaron a esta pareja: «Odín y Freya» o «Wotan y Frigga»; los griegos los llamaron «Zeus y Hera»; los romanos «Júpiter y Juno»; los egipcios «Osiris e Isis» entre otros.
Todos los nombres por su mismo significado reflejan la verdadera naturaleza y papel de estos seres.
Por ejemplo, Odín y Wotan significan: «portador de luz en el universo»; Júpiter: «portador de luz»; Osiris: «luz de los cielos».
Por lo tanto, Odín, Wotan, Zeus, Júpiter y Osiris son (a pesar de sus nombres diferentes) siempre el mismo ser y siempre se refieren al guía supremo y gobernante del Olimpo.
Pero si ahora empiezas a leer sobre las diversas mitologías esperando aprender más sobre los grandes Seres Elementales, seguramente te sorprenderás por los muchos actos crueles descritos en estas historias. (Por ejemplo: el mito de Cronos, quien devoró a sus hijos inmediatamente después de su nacimiento, porque se profetizó que uno de ellos lo derrocaría.)
Por lo tanto, debe notarse que estos actos solo fueron atribuidos a los «dioses,» pero en realidad son el producto de la influencia por parte de Lucifer.
Durante los últimos siete mil años, esta influencia también causó que el verdadero conocimiento que poseían los seres humanos en aquel tiempo sobre la actividad benéfica de estos seres supremos fuera borrado por completo.
Así, casi imperceptiblemente, las prácticas de adoración también cambiaron: En todas partes se erigieron imágenes y estatuas con el único propósito de oscurecer y destruir la verdad sobre estos grandes seres, e incluso se proclamaron «nuevos dioses» que demandaban formas inmorales o crueles de adoración de ídolos.
***
A través de la actividad de los seres poderosos del Olimpo (Valhalla), también se crearon las siete partes del mundo (cada una de las cuales es a su vez un universo) cuyos tamaños inmensos nunca pueden ser comprendidos por el intelecto humano, que ni siquiera puede imaginar la infinidad aparente de su propio universo (cosmos).
Nuestro cosmos consiste en millones de galaxias. Cada galaxia contiene miles de millones de estrellas, y algunas de estas estrellas son los centros de sistemas planetarios como nuestro propio sistema solar, y hay innumerables sistemas así.
Estos son ahora los nombres de las siete partes del mundo (mencionadas en el Libro del Apocalipsis, pero falsamente interpretadas como ciudades terrenales, ya que en realidad hay ciudades con los mismos nombres en la Tierra): Éfeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea.
Nuestro planeta pertenece a la parte del mundo Éfeso. Todos los objetos visibles en el cielo nocturno, ya sea a simple vista o a través de los telescopios más grandes, forman parte de Éfeso. Sin excepción, todo esto consiste en materia densa, incluso cuando también involucra nebulosas difusas. Sin embargo, la humanidad nunca será capaz de mirar hacia ninguna de las otras partes del mundo (universos) con sus instrumentos materiales densos.
El espíritu humano, por otro lado, ha recibido el poder no solo de transformar y dar forma a su propio universo, sino también de ejercer influencia en todos los planos etéreos. Esto, aún así, nunca será comprensible para el intelecto, por lo que no debería abordarse más aquí.
Sin embargo, hay una cosa que podemos entender hasta cierto punto con el intelecto: es decir, el profundo significado de la declaración: los pensamientos crean la realidad. Dicho esto, nosotros también reducimos todo esto al mínimo para lograr solo objetivos terrenales y personales: dinero, un cuerpo en forma, fama, etc. Este tema es sin duda fascinante, pero no podemos elaborar sobre él dentro del marco de esta conferencia.
Sin embargo, lo poco que compartimos nos ayuda a desarrollar una perspectiva mucho más amplia sobre nuestra verdadera existencia como espíritus humanos y darnos cuenta de que necesitamos dejar de obsesionarnos y fijarnos en «nuestro pequeño rincón»: esas cuatro paredes con una hipoteca de 30 años que se ha convertido en todo nuestro mundo y que estamos dispuestos a defender con nuestras vidas…
***
Para resumir: ¡Aunque solo miremos hacia abajo, en estos Días del Juicio Final debemos mirar hacia arriba!
Esto es porque nuestro origen es más elevado que el de los Seres Elementales, y por lo tanto si aspiramos hacia arriba, los reconoceremos. Pero entonces también dejaremos de considerarlos como dioses, porque no son dioses, sino fieles servidores de Dios, que pueden enseñarnos el verdadero significado del servicio gozoso en la Creación.
Capítulo Cuatro: Sobre la Actividad de los Pequeños Seres Elementales
No solo se nos requiere reconocer a los grandes gobernantes elementales, los Señores de la Naturaleza, sino que también debemos reconocer la actividad de los pequeños Seres Elementales, que están mucho más cerca de nosotros. Sin embargo, tendemos a descartar las historias sobre ellos como meros cuentos de hadas, leyendas y fantasías. Estos incluyen, entre otros:
Los gigantes, los gnomos, los elfos, las hadas y las salamandras.
Estos pequeños seres crearon el planeta Tierra con sus propias manos, convirtiéndolo en sublime belleza, y hasta el día de hoy, fortalecen y preservan la naturaleza.
Durante el tiempo cuando aún existía una relación de amor mutuo entre los seres humanos y los Seres Elementales, hicieron todo lo que estaba en su poder para guiar y facilitar la vida de la humanidad.
Pero esta conexión entre los humanos y los elementos fue destruida hace mucho tiempo. Los fieles servidores del Creador huyeron de los seres humanos.
El abismo que separa a estos seres de la naturaleza de los humanos se ha vuelto casi imposible de salvar.
Sin embargo, la evidencia de su existencia aún puede encontrarse en varios lugares:
El Corán, por ejemplo, confirma que además de los ángeles y los seres humanos, Dios también creó a los Jinn. (El genio que emerge de la lámpara de Aladin en los cuentos de «Las Mil y Una Noches», comúnmente conocidas como «Las Noches Árabes», no es más que un Ser Elemental.) Estos Seres no están compuestos por materia densa, pero existen en el mundo de la materia gruesa. Son los arquitectos de la materia y por lo tanto llevan a cabo muchas actividades en el mundo material.
En la Europa del siglo XVI, fue el famoso médico Paracelso quien preservó el conocimiento sobre los Seres Elementales.
Dedicó una de sus muchas obras a estos seres, a quienes afirmaba conocer personalmente ya que podía percibirlos: «Un Libro sobre Ninfas, Silfos, Pigmeos y Salamandras, y sobre los Otros Espíritus.»
A veces los niños logran verlos, pero cuando les cuentan a los adultos, estos se burlan de ellos, pensando que la «gente pequeña» son meramente frutos de la imaginación de sus hijos.
Los animales también, quienes tienen su origen en la Esfera Animista, pueden percibirlos y por lo tanto reciben advertencias sobre eventos naturales de parte de los Seres Elementales, los cuales luego comunican a sus dueños de varias maneras. (Esto no es porque los animales tengan un «sexto sentido» como especula la ciencia en su intento de encontrar una explicación racional para este fenómeno.)
En nuestra serie «Historias de Karma» en nuestro sitio web, describimos cómo una mujer y su familia se salvaron de un terremoto en Perú porque ella escuchó las señales de advertencia dadas por sus pájaros enjaulados.
El ejemplo más famoso de esto en la Biblia es la historia del burro de Balaam (Números Capítulo 22):
Por orden del rey de Moab, el profeta Balaam partió para maldecir al pueblo de Israel. En el camino, un ángel apareció para detenerlo, pero solo el burro pudo verlo. Por supuesto, aquí tampoco estamos hablando de un ángel (que no desciende directamente a la tierra) sino de un Ser Elemental alado. (Por cierto, la palabra hebrea para «ángel» proviene de la raíz que significa «hacer trabajo», ¡que es exactamente lo que hacen los Seres Elementales!)
El burro se apartó del sendero tres veces, y cada vez Balaam lo golpeó. Finalmente, el burro habló y preguntó por qué lo estaba golpeando.
Solo entonces Balaam vio al ser que le explicó a Balaam que el burro le había salvado la vida.
A veces las situaciones extremas pueden ampliar nuestra capacidad de percibir, como describió Charles Lindbergh. Fue el primer piloto en volar solo a través del Océano Atlántico en 1927. En su libro «El Espíritu de St. Louis», describe cómo (exhausto por el frío, las duras condiciones climáticas y la falta de sueño) logró llegar a su destino gracias a la guía de los Seres Elementales.
Permíteme compartir una historia personal: Una vez me perdí en un bosque donde los lobos rondan por la noche (cualquiera que me conoce sabe que no tengo absolutamente ningún sentido de la orientación) y oré a los Seres Elementales pidiendo ayuda para encontrar mi camino. En cinco minutos, una bandada de pájaros apareció súbitamente de la nada y voló de forma muy llamativa a lo largo de cierto sendero. Sabía que esta era la señal visible que los Seres Elementales me habían enviado, y siguiendo la dirección que los pájaros indicaron, encontré mi camino a casa.
***
Hoy, en estos tiempos del Juicio Final, hay personas que ya poseen conocimiento sobre los Seres Elementales (conocimiento que muchos de ustedes están descubriendo por primera vez).
Anhelan poder ver (al menos una vez en sus vidas terrenales) a los gigantes, gnomos, elfos, hadas, salamandras y muchos otros.
Con un dolor lleno de anhelo, se preguntan por qué (a pesar de su fe absoluta) su deseo no puede cumplirse.
La respuesta es que es casi imposible percibir a los Seres Elementales de la naturaleza dado el estado actual al que ha caído la humanidad.
Nunca los veremos con el ojo físico ya que no son físicos. Por lo tanto, tendríamos que aprender a ver con el ojo espiritual.
Sin embargo, a través del dar, una persona con una voluntad pura puede ganar el favor de los Seres Elementales para que se acerquen a él nuevamente.
Esto es porque solo a través del dar se puede recibir.
Así que, ¡primero necesitamos aprender a dar algo a la naturaleza!
Y dar no significa solo proteger la naturaleza (que es lo que típicamente hacemos mejor, aunque la mayoría de la humanidad ni siquiera logra eso). Más bien, significa entender que como seres espirituales, estábamos destinados a salir a la naturaleza y compartir nuestro poder espiritual con los elementos, quienes entonces protegerían nuestros cuerpos y salud a cambio.
Además, aunque los Seres Elementales no pueden liberar a nadie del karma, su protección es invaluable, ya que pueden aliviar e incluso desviar mucho del karma, por ejemplo, previniendo lesiones y accidentes.
«Porque a sus ángeles mandará acerca de ti, Que te guarden en todos tus caminos. En las manos te llevarán, Para que tu pie no tropiece en piedra.»
Este es un verso muy famoso (del Salmo 91, versos 11 y 12) que promete la protección de los ángeles para aquellos que confían en Dios, aunque, como hemos visto, los seres que proporcionan esta protección no son ángeles, sino los Seres Elementales.
Sin embargo, dado que esta verdad ha sido olvidada por nosotros, hoy, incluso los amantes de la naturaleza en realidad protegen la naturaleza para su propio beneficio. Para poder disfrutarla y ser energizados por ella.
En otras palabras, ¡incluso los protectores y amantes de la naturaleza desconocen por completo que drenan energía de los Seres Elementales como vampiros, sin dar nada a cambio! (Y ni siquiera mencionemos lo que sucede en las «fiestas en la naturaleza» con música trance, drogas, e incluso el mero humo de cigarrillos… Esto es tan terrible para los Seres Elementales que nadie podría pensar que recibiría protección de ellos en tales situaciones…)
***
Describamos ahora una pequeña parte de las actividades de los diversos Seres Elementales. (Se han escrito libros completos sobre este tema.)
Los gigantes poseen enormes poderes de magnitud inimaginable. No solo pueden levantar montañas y construir otras nuevas, sino que también construyeron la Gran Pirámide de Giza, Stonehenge y las Líneas de Nazca.
Los guardianes del bosque también trabajan con radiación que emiten, la cual le da al bosque su frescura y fragancia.
Los gnomos de campos y praderas pueden ayudarnos a resolver uno de los grandes misterios de nuestro tiempo: ¡los círculos en los cultivos! Porque son ellos quienes los crearon, con el propósito de transmitirnos mensajes.
En el mar, se mueven innumerables seres acuáticos. Su señor es Neptuno con su tridente. (Conocido en las mitologías como el dios del agua, pero ya sabemos que es un gran Ser Elemental, un Señor de la Naturaleza, responsable del agua).
Su tridente no es un mito: verdaderamente lo lleva en su mano derecha, y este tridente, que las personas aún podían ver en tiempos pasados cuando todavía estaban conectadas con los Seres Elementales, está cargado con poderes superiores.
Cuando leemos en los periódicos historias sobre cómo aguas que una vez estuvieron calmadas se intensifican en fuerzas furiosas que destruyen todo a su paso, debemos saber que esto es hecho por los elementos del agua bajo el comando de Neptuno.
Actualmente, la tarea principal de los Seres Elementales del aire es barrer la Tierra limpiándola de toda oscuridad, incluyendo las formas de pensamiento oscuras y tóxicas que cuelgan sobre la tierra como gases venenosos.
También hay pequeños Seres Elementales que guardan y protegen nuestros hogares, a quienes les deberíamos mostrar mucha más gratitud de la que les hemos mostrado hasta ahora. En su lealtad, trabajan constantemente para mantener alejadas de nosotros las influencias dañinas.
En los hogares de personas generosas y buenas, limpian las formas de pensamiento feas y maliciosas que tratan de entrar y establecerse allí.
Pero en hogares donde tienen lugar peleas, celos, codicia, mentiras e inmoralidad, los pequeños seres tristemente se van y no pueden cumplir su misión. La bendición entonces está ausente de estos hogares.
Hay otros seres que la mayoría de nosotros no conocemos, y estos son nuestros ayudantes corporales, a quienes también les debemos tanta gratitud, porque ayudan a nuestro cuerpo a mantenerse saludable.
Cuando dormimos por la noche y nuestro espíritu viaja a otros planos, pueden trabajar sin perturbaciones en nuestro cuerpo, y trabajan incansablemente para que siempre estemos saludables a fin de cumplir nuestra misión principal para la cual encarnamos en la Tierra.
Cuando nuestro alineamiento interno es correcto, ¡incluso ayudan a cambiar la estructura de nuestro cerebro para que nuestro cerebro pequeño, el cerebelo, pueda estar más activo!
Pero debemos apoyar este trabajo dando a nuestro cuerpo lo que necesita: nutrición adecuada, descanso suficiente, higiene, y especialmente manteniendo la calma interior y evitando el estrés.
Al mismo tiempo, debemos recordar que los Seres Elementales ayudarán especialmente a aquellos cuyo espíritu está dirigido hacia arriba, ¡en servicio a la Luz!
Protegerán sus cuerpos con cuidado extra, incluso si no siguen una dieta orgánica estricta, en virtud de una especie de pacto secreto entre ellos que dice:
«Tú trabajarás para la Luz y nosotros protegeremos tu cuerpo para que puedas cumplir tu misión.»
¡El conocimiento sobre los Seres Elementales y la conexión con ellos serán la base para el cuidado de la salud en el nuevo mundo!
Capítulo Cinco: Un Vistazo a un Nuevo Mundo
Este capítulo se basa en un libro profundo para la nueva era: «Un Vistazo a un Nuevo Mundo y el Fracaso de la Humanidad,» que está disponible para la compra en varios idiomas a través de https://letitbegin.net/index.php/en/home .
Este libro revolucionario es un llamado a los científicos, quienes están destinados a descubrirlo y convertirse en pioneros de la ciencia en el nuevo mundo.
Entre otras cosas, este libro crea un puente entre el conocimiento de la actividad de los Seres Elementales y la ciencia. Aborda particularmente la conexión entre estos seres, los descubrimientos de la física cuántica, y la posibilidad de crear energía libre (como ya visionó Nikola Tesla).
Pero primero, entendamos la diferencia principal entre la física clásica y la física cuántica, que comenzó a desarrollarse al inicio del siglo XX.
Mientras que la física clásica buscaba explicar el mundo únicamente a través de leyes materiales, la física cuántica descubrió que las partículas de materia se comportan de maneras que la legitimidad material no puede explicar o justificar. (Por cierto, el término «cuántico» se refiere a las unidades fundamentales más pequeñas que componen todo lo que nos rodea.)
Elaboremos:
El átomo está compuesto de partículas extremadamente pequeñas: electrones, protones y neutrones. (Algunos de nosotros aún recordamos esto de las clases de física en la escuela…)
Sin embargo, la física cuántica descubrió que incluso estas pequeñas partículas (los protones y neutrones) están compuestas de componentes aún más diminutos, conocidos como partículas fundamentales, que no pueden ser observadas directamente pero cuya actividad puede ser detectada.
¡Sin embargo, la actividad invisible de todas estas partículas fundamentales es en realidad el resultado directo de la cooperación entre lo espiritual y lo anímico!
Más precisamente: La interacción de partículas espirituales y partículas anímicas crea radiaciones que a su vez forman la cáscara material alrededor de estos componentes fundamentales, que percibimos como materia. ¡Así es como se crea la masa de materia en todas sus diversas formas!
Para resumir: ¡aquello que crea la materia, no es la materia misma!
Por lo tanto, sin las radiaciones espirituales y anímicas, todo desarrollo material cesaría, y ocurriría la descomposición, ya que sus radiaciones proporcionan la fuerza vinculante que conecta y mantiene todo unido.
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A lo largo de la evolución, todo lo que corresponde a lo elemental cumplió fielmente su papel.
Sin embargo, lo espiritual, al cual se le dio libre albedrío para ejercer su poder creativo y refinador, traicionó el Plan de la Luz al enfocar todas sus aspiraciones solo hacia abajo, hacia lo terrenal y lo material.
En otras palabras, el poder creativo del espíritu fue mal utilizado, y así todo lo elemental, que no posee libre albedrío, fue inevitablemente forzado a someterse a la voluntad distorsionada de lo espiritual. Esto tuvo un impacto enorme también en la estructura de la masa de materia: se volvió cada vez más densa y pesada porque el espíritu humano no canalizó suficiente Luz hacia la materia.
Así, las fuerzas vinculantes, que son las fuerzas que conectan todas las partes del átomo y que, como se mencionó, no son más que las radiaciones de partículas espirituales y partículas anímicas, se volvieron cada vez más rígidas en su efecto dentro de la materia.
Como resultado, el planeta Tierra, con toda la materia dentro de él, se volvió pesado y denso.
Este proceso puede ser percibido intuitivamente cuando observamos a una persona cuya chispa espiritual se ha extinguido, y reconocemos su «pesadez.» O cuando nos encontramos en una ciudad grande y abarrotada y percibimos cuán toscos, feos y distantes de la Luz son todos esos edificios (razón por la cual a los Seres Elementales no les gusta habitar en ellos…).
En contraste, cuando los seres humanos están conectados a su conciencia espiritual, afectan la materia en la dirección opuesta: las fuerzas vinculantes entonces se vuelven más sueltas, la rigidez se disuelve y la materia se vuelve menos densa y pesada. En otras palabras, se vuelve más ligera, más «aérea,» y luminosa.
¿Cómo se relaciona todo esto con la energía libre, de la que habló Tesla? Es decir, energía que no contamina ni explota la naturaleza, que es inagotable, y que está disponible para cada persona sin costo alguno?
Aquí necesitamos describir un tipo muy específico de estas partículas fundamentales:
Neutrinos.
Las partículas de neutrinos, que en realidad son partículas fundamentales animistas que no forman parte del átomo, penetran constantemente la materia en miles de millones incontables, pero debido al estado denso actual de la materia, no pueden afectarla.
Esto se puede comparar con una turbina eólica: cuando las aspas son demasiado pesadas, el viento no puede moverlas para generar energía.
En otras palabras, en nuestro estado actual, los Seres Elementales no pueden ayudarnos a generar energía libre.
Esto era posible en tiempos antiguos, cuando los seres humanos aún mantenían una conexión con la Luz. En contraste, nosotros, que nos percibimos como tan «avanzados», hemos perdido esta posibilidad precisamente porque hemos «avanzado» ¡solo con el intelecto!
La energía libre es en realidad una energía compuesta por los neutrinos, que los pueblos antiguos ya podían usar y simplemente llamaban con un nombre diferente: Fuerza de Luz. Por lo tanto, ¡la capacidad de obtener tal energía nuevamente está estrechamente conectada con nuestro estado espiritual!
Si la materia efectivamente se vuelve ligera, aérea y luminosa, gracias a la renovada orientación hacia arriba del espíritu humano, los átomos de la materia se volverán más similares a los neutrinos. ¡Esto permitirá una interacción entre ellos y llevará a la creación de energía libre inagotable!
Volviendo a nuestro ejemplo anterior, si la materia se vuelve más ligera y luminosa, esto significaría que las aspas de la turbina eólica se volverían más ligeras y entonces el viento podría moverlas.
Nikola Tesla ya había realizado experimentos exitosos en esta área, y según reportes, incluso construyó prototipos tempranos de dispositivos que funcionaban con esta energía libre. La llamó fuerza cósmica porque las partículas de neutrinos aún no se conocían en ese momento. Tesla fue uno de los importantes Llamados que estaba destinado a desarrollar esta tecnología usando el conocimiento que yace en la obra «En la Luz de la Verdad: El Mensaje del Grial». En el curso avanzado de nuestra escuela, estudiamos la edición original de 1941 de esta obra maestra (que solo se puede encontrar en https://letitbegin.net/index.php/en/home/ o https://shop.letitbeginuk.com/ ), junto con todas las explicaciones y orientación necesarias para nuestros tiempos.
Sin embargo, mucho antes de la muerte de Tesla en 1943, el concepto de energía libre fue completamente abandonado porque dejó de producir resultados favorables. Esto sucedió porque la materia entonces comenzó a volverse más densa, haciendo imposibles las interacciones entre la materia y estas partículas.
En ese momento, el éxito de los experimentos solo fue posible porque el Hijo del Hombre estaba en la Tierra, y su Poder ayudó a aflojar las fuerzas de unión.
Desde entonces, hemos desarrollado y estamos promoviendo activamente energía contaminante que explota el planeta Tierra porque este tipo de energía funciona bien en condiciones densas. En planos más ligeros y luminosos, nadie consideraría usar nuestra tecnología actual, pero aquí, en este ámbito pesado y denso, no hay alternativa.
Sin embargo, a medida que la densidad disminuya, esto se volverá cada vez más posible, y para gran asombro de todos los físicos, la energía libre estará disponible para uso práctico en tecnología y de otras maneras.
La humanidad aprenderá a conectarse con esta fuente de energía limpia e inagotable.
Inicialmente, esta tecnología puede funcionar en algunas regiones pero no en otras, dependiendo de ciertas condiciones y el estado espiritual de las personas que viven allí.
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¡El espíritu humano posee tanto poder! ¡Podría haber elevado a Éfeso para convertirla en un reflejo del Paraíso, pero en su lugar la convirtió en un infierno en la tierra!
Por lo tanto, incluso aquellos que no entienden todas las explicaciones científicas deberían darse cuenta de que pueden contribuir fácilmente al aflojamiento de las fuerzas de unión y permitir la ascensión del planeta Tierra. ¡Esto se puede lograr de una manera simple: hacer de la Luz su único anhelo en la vida!
(Esto, por cierto, es exactamente lo que hacen las personas justas, ¡quienes usualmente saben poco o nada sobre física en general, y física cuántica en particular!)
Esto es porque este es efectivamente el único anhelo natural del espíritu cuando no es suprimido por el intelecto y las emociones: ¡el anhelo de obtener conciencia espiritual esforzándose hacia arriba para elevarse! (Mientras que las dos conciencias terrenales, el intelecto y las emociones, por su propia naturaleza siempre dirigen su mirada hacia abajo…)
¡El espíritu sabe que el mundo material no es su hogar!
Tal espíritu maduro nunca destruiría, por ignorancia y arrogancia, el lugar de hospitalidad que abrió sus puertas para él, ni siquiera consideraría hacer del mundo de la materia densa su morada permanente, como si ese fuera el objetivo más alto de su existencia.
Sabe que es solo un huésped que ha venido a hacer su contribución única y dar gracias por la hospitalidad, pero luego debe continuar hacia su verdadero hogar… ¡al Paraíso!
Capítulo Seis: El Gran Cometa
Muchas personas temen a los asteroides y cometas.
Por lo tanto, aunque la mayoría de las personas no están familiarizadas con la combinación de los conceptos: «El Juicio Final» y «El Gran Cometa», estos despiertan en ellas un miedo inexplicable.
Este es en realidad un miedo ancestral y primitivo que está grabado en sus almas sobre un tiempo cuando llegará el ajuste de cuentas final por todo el comportamiento incorrecto de la humanidad a lo largo de miles de años, del cual ninguna persona podrá escapar.
Y efectivamente, incluso antes de que este gran y único cometa se vuelva visible, su influencia resultará en la escalada intensificada de eventos que llamamos: desastres naturales.
¡Y esto es exactamente lo que está sucediendo ahora!
Por supuesto, no podemos ayudar a aquellos que no quieren escuchar sobre esto y tampoco comprenden lo ridículo que es negar todos los eventos extraordinarios (¡que suceden ante nuestros propios ojos cada día!) y tratarlos como eventos que siempre han tenido lugar, de la misma manera. O pensar que la ingeniería climática puede causar todos estos fenómenos en todas partes alrededor del mundo, porque las élites esencialmente están jugando el papel de «los nuevos dueños del mundo…»
Pero aquellos que han seguido toda la conferencia hasta este punto ya saben por qué está sucediendo esto.
En este capítulo, solo profundizaremos más en el asunto desde una perspectiva diferente.
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Debido al fracaso de la humanidad, que como se mencionó, se ató cada vez más a la materia, el planeta Tierra se ha vuelto más pesado y lento. Se hundió hacia abajo y fue empujado a una órbita que ya casi no está influenciada por la Luz.
Por lo tanto, la ejecución del “Juicio Final», que estará bajo la influencia del Gran Cometa, devolverá todo Éfeso a la órbita que originalmente fue designada para él.
Este cometa se ha desprendido del reino espiritual primordial eterno y está avanzando en su trayectoria en línea recta hacia esta parte del mundo.
Su núcleo está lleno de alto poder espiritual; se envuelve en materia y así finalmente se volverá visible para la humanidad en la Tierra también.
Con la llegada del Gran Cometa, la Tierra temblará por sus radiaciones, y una nueva era de la humanidad comenzará: ¡la Era de la Verdad!
Mientras tanto, el Gran Cometa envía mensajeros desde su interior, que están destinados a intensificar la radiación y revitalizar directamente la densidad, sin destruirla inmediatamente:
En 2012 llegó el primer mensajero: El cometa Ison.
En mayo de 2020, la radiación del segundo mensajero: El cometa Atlas, comenzó a afectar al planeta Tierra y su influencia continúa hasta el día de hoy.
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¿Qué deberíamos hacer para prepararnos para esta era?
Cuando escuchamos estas descripciones, inicialmente parece que no hay nada que podamos hacer y que estamos destinados a cosechar nuestro mal karma.
¡Sin embargo, el karma no está destinado a castigar, sino a permitir que una persona experimente las consecuencias de sus acciones incorrectas, para que elija cambiar para mejor!
¡El karma es una oportunidad para la corrección interna, el realineamiento y la purificación!
Por lo tanto, no debemos quedarnos sentados sin hacer nada o resignarnos con una actitud derrotista esperando a que ocurra lo peor.
Tampoco debemos atribuir a nuestra indolencia espiritual varios títulos como: «esperar la redención» o «confiar en Dios.»
Porque si ya hemos entendido que debido a nuestro fracaso en escuchar a nuestro espíritu, trajimos al mundo al estado en que se encuentra, se supone que debemos e incluso tenemos que cambiar de rumbo ahora en la dirección opuesta.
El hombre no puede ser tan activo en la destrucción y luego permanecer de manera completamente pasiva cuando se le requiere reparar el daño que ha causado.
¡Por lo tanto, debemos ser activos y contribuir con nuestra parte al proceso de redención tanto de nosotros mismos como del mundo entero!
Cuando nos convertimos en un nuevo ser humano, que es lo que aprendemos en los diversos cursos de la Escuela Alma para la Humanidad, seremos magnetizados por los rayos del cometa, según la Ley de Atracción entre Especies Similares. Esto es porque su origen también está en la esfera espiritual.
Esto se puede explicar con la siguiente imagen:
Hay dos imanes: uno fuerte = el cometa, y uno débil = nuestro espíritu.
Si nuestro espíritu se vuelve más fuerte, será atraído por el cometa fuerte. ¡Y realmente sentiremos esto porque el espíritu será asi liberado de las cadenas internas, resultando en una sensación de fuerza y alegría que nunca antes habíamos conocido!
Por lo tanto, toda persona que cree en Dios y Su Justicia absoluta debe mirar hacia adelante y hacia arriba con calma y confianza, y no temer lo que está por venir en los años venideros.
Si elige levantar sus ojos hacia arriba, confiadamente hacia Dios, ningún daño le sobrevendrá.
En contraste, si mostramos indiferencia o debilidad ante todos los eventos del Juicio Final, entonces nuestro espíritu será un imán demasiado débil para que el cometa lo magnetice, y entonces ocurrirá el proceso opuesto: las cadenas internas, que son la conciencia intelectual y la conciencia emocional, nos arrastrarán hacia abajo y experimentaremos miedo, desesperación, depresión y ansiedad como nunca antes habíamos conocido.
¡Este trabajo interno no es solo para la salvación de cada uno de nuestros espíritus individuales, sino también para la salvación de todo el planeta!
¡Y para este trabajo precisamente, los 144,000 Llamados deben dar un paso adelante, aquellos a quienes menciono en todas las conferencias dadas al público general y a quienes llamo una y otra vez a venir, para que juntos, podamos cumplir nuestra antigua promesa!
***
Ahora, describamos la cooperación requerida entre los Llamados y el Cometa, y finalmente también explicaremos cómo esto se relaciona con los Seres Elementales y los eventos naturales.
Como ya se mencionó, el papel de los Seres Elementales es traer el Juicio a través de las fuerzas de la naturaleza.
Pero para que puedan destruir solo lo que está mal y no todo el planeta Tierra, necesitan las radiaciones del Cometa, que primero tienen que ser transformadas por los espíritus de los Llamados.
Esto es necesario porque solo los espíritus de los Llamados pueden servir como el eslabón de conexión entre las radiaciones del Cometa, cuyo origen está en la Esfera Espiritual Primordial, y la Esfera Animista.
Por lo tanto, se requiere que el espíritu del ser humano Llamado se abra y absorba estas radiaciones a través de su intenso anhelo de servir a la Luz, y luego las transforme a través de su propio ser: a través de la purificación interna y la alineación, la comprensión profunda de las conexiones, y sobre todo, el amor y la confianza en Dios.
El trabajo de los Llamados en el proceso de redención también se puede ilustrar de la siguiente manera:
Por un lado, desde arriba, está el Cometa, enviándonos sus radiaciones, ¡que abrazan y sostienen al Planeta Tierra para que no caiga en la destrucción!
Por el otro lado, desde abajo, ¡cada uno de los Llamados tiene un poder enorme para elevar a Éfeso hacia el Cometa!
Para comparar, si una persona ordinaria tiene el poder de una gota de agua, ¡cada Llamado tiene el poder de un océano!
Por lo tanto, si todos los 144,000 Llamados trabajan para purificarse desde adentro y mantenerse alineados con la Voluntad de la Luz, ¡juntos podrán ayudar a elevar a Éfeso desde abajo!
Así, a través de esta cooperación, cuando llegue el momento en que el Cometa finalmente eleve el planeta Tierra y se cumplan todas las profecías, el planeta Tierra y toda la humanidad no estarán condenados.
Por supuesto, todo lo que acaba de ser explicado no puede ser comprendido de ninguna manera, forma o modo por el intelecto muy limitado de la mayoría de las personas. Las personas intelectuales usualmente descartan el «trabajo espiritual» y piensan que solo algo práctico como las manifestaciones contra el sistema ¡puede realmente ayudar!
Pero la razón de esto reside en su ignorancia del hecho de que al espíritu humano se le ha dado tan gran poder que puede influir no solo en la condición del planeta Tierra, ¡sino también en sistemas solares y galaxias enteras!
***
¿Dónde se verán los efectos del Gran Cometa?
Contrario a la lógica del intelecto y las emociones, es precisamente en lugares donde los seres humanos están sufriendo por guerras, pobreza, etc; que los rayos del Cometa y los eventos naturales purificadores tendrán lugar primero. Porque estas personas ya no pueden buscar satisfacción en sus vidas terrenales y por lo tanto han puesto sus esperanzas muy arriba.
En otras palabras, la sanación comienza donde existe el anhelo más genuino por la Luz.
Por lo tanto, no significa que estemos más cerca de la Luz si, protegidos por la densidad es decir, a través de la tecnología y las finanzas permanecemos ilesos, ¡sino más bien lo contrario!
Solo debemos recordar que cuando los rayos del Cometa rodeen completamente el planeta Tierra, afectarán todo, incluso llegando a los rincones más remotos y densos.
Capítulo Siete: Todo está Previsto, Sin Embargo se Otorga el Libre Albedrío
La humanidad ahora enfrenta dos posibles escenarios: sanación o destrucción.
Los Seres Elementales están listos y preparados para ejecutar cualquiera de los dos escenarios.
El primer escenario representa el sendero misericordioso del Juicio, trayendo esperanza para el futuro de la humanidad. Este resultado optimista solo ocurrirá si los Llamados cumplen su papel.
De hecho, incluso este sendero de misericordia involucra tremendas convulsiones, pero no lleva a la destrucción de casi toda la humanidad, sino más bien a una transformación que tendrá lugar a lo largo de varias generaciones; transformación del mundo así como de aquellos espíritus humanos que elijan la purificación interior y se alineen con la Voluntad de Dios.
Los Llamados también deben servir como el ejemplo y modelo del nuevo ser humano. Siguiendo su liderazgo, el resto de la humanidad en quien la chispa del espíritu aún no ha sido extinguida podrá seguir.
Sin embargo, si los Llamados no cumplen su misión, enfrentaremos el segundo escenario:
El planeta Tierra sin embargo será elevado por la presión de la Luz (porque esto es lo que Dios demanda ahora) pero entonces, durante este ascenso, la Tierra será transformada bajo esta presión de tal manera que casi toda la humanidad será aniquilada.
Solo muy pocos espíritus humanos cuyo anhelo por la Luz no ha sido extinguido podrán sobrevivir tal escenario en el planeta Tierra.
Estos pocos entonces se convertirán en la base para la nueva generación en la Tierra purificada.
Si, Dios no lo permita, llegamos a este escenario, entonces el planeta Tierra será como el Arca de Noé, donde solo lo que es necesario y solo aquellos que son dignos sobrevivirán.
¿A qué se puede comparar esto?
A una persona que ha tratado su cuerpo con tremenda negligencia, y entonces un día descubre que una enfermedad seria se ha apoderado de su cuerpo.
En el primer escenario, después de una cirugía dolorosa y un proceso de recuperación que requiere un cambio completo de estilo de vida, esta persona se sanará exitosamente, a pesar del sufrimiento involucrado que genera este proceso.
En el segundo escenario, la enfermedad será descubierta demasiado tarde, y entonces la persona no tendrá otra opción que tomar muchos analgésicos, que sin embargo no prevendrán su muerte.
¿Qué escenario elegiremos?
¡Todo está previsto, sin embargo se otorga el libre albedrío!
Nosotros, en «Alma Escuela para la Humanidad» elegimos esforzarnos y ejercitar nuestra fuerza espiritual y terrenal al máximo a través de nuestra alineación interior, voluntad y acciones para el cumplimiento del primer escenario: una purificación que traería sanación, una transformación completa para un futuro lleno de esperanza para la humanidad actual!
Por lo tanto, si escuchas el llamado ¡únete a nosotros!
Que inclinemos nuestras cabezas y doblemos nuestras rodillas en gratitud a Dios, cuya Misericordia y Bondad hacia nosotros perduran, incluso durante el Juicio Final.
Así como toda la Creación sirve y alaba a su Señor y Creador, ¡que finalmente hagamos lo mismo!
Que tengamos un solo deseo profundo: ¡Que haya Luz, en todas partes! ¡Que la santa Luz de Dios brille victoriosamente sobre todo!
¡Amén!
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Sobre la oradora: (la autora de la conferencia)
Jaguit Rabbi
Jaguit es profesora y fundadora de la Escuela Alma para la Humanidad. Graduada del Departamento de Talmud y Filosofía de la Universidad Hebrea de Jerusalén, ha dedicado más de 20 años a explorar las preguntas profundas de la existencia humana, inspirándose en fuentes de conocimiento superiores que trascienden el estudio intelectual.
La escuela ofrece lecturas, artículos, podcasts y cursos digitales diseñados para desarrollar la conciencia espiritual, basada en las Leyes Universales de la Creación.